viernes, 3 de febrero de 2012

Bienvenidos al Paraiso


Es una cuestión de actitud, no hay más. Te puedes hartar de llorar, o te puedes coger una borrachera de mil pares de cojones y volver a casa con una "tajá" mas grande que un carro de paja. Te puedes quedar acostado y no levantarte en seis días: es más, incluso está permitido el que te dé por no pisar el suelo de la ducha ni para matar una araña. Todo eso vale, pero no funciona, ya os lo digo.

Por el contrario, no hay nada como enfundarte el gore-tex y salir a ver si eso de que va a hacer frío es de verdad o es otra exageración de los meteorólogos (en vez de tanta Galicia, empezad por Cádiz un día coño!...) Seis horitas, seis: en subir y bajar. Mil metros de desnivel y lo mas curioso: en la salida, a las 9.30 am. catorce bajo cero; a las 14.30 hs. en la cima del veleta, catorce bajo cero; a las cuatro y media de la tarde en la Hoya de la Mora, premio! catorce bajo cero!

Vaya día mas maravilloso. Perfecto para probar material. Perfecto para esputar sapos y culebras. Perfecto para hacer por fin una cima en condiciones. Mi reflexión ha sido, lo confieso, absolutamente vanidosa. Con tanta alerta de frío siberiano , hoy en España, hemos sido unos pocos los elegidos para estar a más de tres mil metros comiendo tortilla de patatas congelada. Es más, por estos lares, solo había cuatro más, y manda huevos, habían venido desde Picos de Europa buscando el "solecito".